“F3” del nuevo libro "Sensitiva” de Richard R. Crown, México, 2019 © Todos los derechos reservados. Queda prohibida la reproducción total o parcial de esta obra.
... a veces se pide a gritos compartir un F3... tan solo un F3...
… con espuma entre los labios, degustando un sabor conocido, ella sonrió sabiendo que había caído en la trampa...
... observación al 100%... cada día ella llegaba y pasaba a la maquinita de bebidas...
...claramente se detenía unos segundos para revisar el menú de opciones de botones, como disfrutando el momento de la selección, apretando los labios y empujándolos con la lengua deseosa de saborear placer en los próximos segundos....
... buscaba algunas monedas que realmente tenía listas porque nunca le sobraban al insertarlas... pero siempre seleccionaba el mismo botón... mujer que sabe lo que quiere, lo saborea, aparta lo que aportará y lo que disfrutará en su relación con el café recién preparado...
Dicen que los hombres que realmente le ponen empeño y les interesa, investigan un poco para tener una cierta "probabilidad" de atinar el detalle enfocado a la mujer que les interesa compartir tiempo...
... pasó el tiempo, ella y él se ubicaban, se conocían pero no había una claridad de mensaje....
... un buen día, el rocío de la mañana estaba aun visible en las hojas de las plantas de las jardineras del paso caminando que ella hacía para llegar... el sol estaba aun naciente y bañándola con la luz manifestada con una sombra que se extendía al doble de tamaño de las altura de ella...
... ella lo vio a él,... que la esperaba en ese punto, inamovible y mirada mensajera fija dirigida a la mirada de ella...
... finalmente, ella llegó al punto cualquiera dónde el estaba y con expresión dudosa, expectante" le dijo "hola"...
—Hola, te estoy esperando, ¿me permites invitarte un F3?. —Él respondió con voz impostada, segura y dirigida—. No acepto pretextos que te hagan cambiar tu hábito diario.
—¿F3? —dudosa preguntó ella a sabiendas de pregunta era un distractor hipnótico considerando que él tenía la mirada pausada en tu mirada.
—Ven, caminemos a la maquinita. —Él exclamó apresurando la siguiente pregunta para distraerla aún más, que no pensara en el inesperado encuentro y favorecer que siguiera con cara de extrañeza de esa que no te permite pensar —. ¿Cómo va tu día?, ¿crees que llueva?.
En efecto, el camino a la maquinita ya estaba ensayado por él... y por ella... pero la charla era nueva, demasiado nueva para no ser sospechosa.
Cercanos a la maquinita y justo antes de que ella tuviera la intención de llegar a su bolso para sacar algunas monedas, él la interrumpió.
—No, no ¿me permites invitarte?. —Él la interrumpió entregándole justo las 14 monedas de $1 que ella usaría para pagar el F3, mismas que él ya traía en la mano —. Estas son para tu selección, yo traigo las mías acá en la otra mano, justo seleccionaré uno igual, "chocolate abuelita sin azúcar"
Esta ocasión para ella, no hubo dudas en las opciones de café. Esa duda más bien estaban en la extrañeza de la intención de la situación tan cuidada y altamente sospechosa al mirar que la selección era "F3".
Segundos después ambos tenían un F3 para cada quien en sus manos.. y sincronizando el primer sorbo... y justo en ese momento que no podían hablar por tener el líquido en la boca... compartieron una sonrisa dibujada entre ellos... sonrisa que él remató subiendo sus cejas para que fueran evidentes para ella... y sonrisa que ella remató con un "mmm", moviendo horizontalmente de izquierda a derecha, tan sutilmente y tan delatoramente como un "no" minúsculo, un poco de arrebol y con espuma entre los labios, degustando un sabor conocido, ella sonrió más sin poderlo evitar, sabiendo que había caído en la trampa...
Tiempo de elaboración: Observación de hábito, intención de romper ese hábito y lo que tardó más tiempo fue encontrar una maquina de café con un F3 que ofertara un "chocolate abuelita sin azúcar"
Saque esta cuenta porque te sigo Richard R. Crown y te sigo desde hace más de 300 escritos, ya perdí la cuenta. Aunque digas que tus textos son malos y no tienes talento la realidad es que tienes y mucho, erizas la piel con cada uno!, hermosos, bellos, me vuelven loca y tienes la fina delicadeza de volcarte en cada uno de ellos, eres sincero y lindo, tierno, eres un caballero.
No sé que era lo que te motivo esto ni quien era, pero ¿sabes? qué pasa contigo? te rindes? podías escribir hasta cuatro textos por noche y empezaste con textos normales y se nota que evolucionaste por ella, fuiste mejor cada día, tu corazón evolucionó. Reacciona!, se aprecia que…